Sanguineti es aquel que afirmaba que la operación poética siempre es de carácter mitológico, pero no en un sentido elevado o "sublimado-sublimante", sino en un sentido bajo, y que la temática sexual y onírica va de la mano de lo mitológico. Suscribo eso con relación a la materialidad de los textos de Martín Rodríguez, por esto de recuperar la historia por la fuerza de las imágenes.
Por ejemplo, un fragmento del poema 45 de Reisebilder, sección de Wirrwarr:
(ya no sé dónde y cómo esconderlo, si tú no me ayudas): / yo te lo cuento en seguida, ahora que apenas / lo has comprendido: (y debes comprenderme: éste es mi cuerpo:
También proponía Sanguineti la utilización del trabajo pictórico como estrategia de desarticulación del lenguaje funcional a la poesía, cuando esto era visto como un mero ejercicio de provocación.
3. En uno de sus trabajos más interesantes, Wirrwarr, y especialmente el poema 16 de la sección titulada T. A. T., Sanguineti tematiza montado en la figura del poeta polaco Tadeusz Rózewicz. No se trata de mera erudición, sino de un gesto de ubicación de la lengua escritural de Sanguineti, que se corre del centro de ataque (es decir su matriz, su habla de origen) para diversificarse en diferentes matrices; todo molde parece devolvernos el eco del modelo que serializa el arquetipo, y a partir de allí, Edoardo Sanguineti toma como referencia a este escritor, al que le envía una tarjeta, y una pregunta en alemán, "¿Cómo andás?", o "Wie geht es dir?", que obliga a leer, en silencio, los viejos versos del poeta polaco, como parte de un pacto secreto, íntimo, establecido sin preámbulo entre Sanguineti y Rózewicz. Este poema es un rebote, una mirada refractaria, a lo que Sanguineti, en un reflejo gramsciano, llamaba los efectos de las hegemonías culturales. Sanguineti pensaba que las clases dominantes aspiran a figurar por la fuerza el horizonte de la cultura, y cuando eso no ocurre, o sucede en forma insuficiente, se desata una crisis que consigue acelerar la discusión sobre la experiencia artística. Volver a él, hallar sus textos y su pensamiento, será toda una novedad para aquellos que jamás lo leyeron.
4. El sueño del primer punto poco y nada tiene que ver con Sanguineti, salvo por una cosa: sólo por un registro onírico (la plaza, el aerobic, el malentendido campero, etc.) se puede ingresar a una poética tan compleja, deliberada en sus intenciones, pero por fin huidiza. No es poco pedir, mientras estemos rodeados de contribuciones momentáneas y riesgos menores en el horizonte.
4 comentarios:
Nos pasamos la mañana riendo con Horacio sobre ese sueño. Mortal.
Te juro, querido Martín, que es cierto. Es así de textual. Esta mañana soñé que mi perro salchicha objetaba el matrimonio gay. Hay fachos por todos lados.
MArito, Te amo. Chicho López
También te amo, maestro, y usted lo sabe. No me caso con vos porque el divorcio para ambos sale caro. A lo de "Secreto en la montaña" también les pasó. Te debo una devolución, no me olvido. Mañana te mando un mail sobre aquello que me mandaste (suena a tráfico de influencias esto, no?). ¿Cuándo nos veremos en La Plata o en Bahía? Sería bueno, no? Hablemos. Abrazo de osezno.
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