1. Bueno, esto es así. Ataque cardiovascular, insuficiencia respiratoria aguda, y un llanto imposible de frenar. No se trata de milagros, porque se trata de estricta justicia. Los milagros sólo se justifican cuando alcanzan su máximo grado de insensatez. Lo de Gimnasia, alcanzando 3 goles en 19 minutos, y los últimos dos en dos minutos, es la expresión cabal de la justicia terrena.
2. Dios termina en Gimnasia. Dios jamás ayudó a Gimnasia. El Lobo le dijo no a las ganas de consumar el fracaso. Lo que vemos en la foto superior no es otra cosa que el haka tripero, un tipo de baile guerrero que más tarde, otros conjuntos, intentarán imitar sin demasiada gracia.
3. El hombrecito que abre completa su boca, y que al parecer está gritando, en verdad está gritando. De su boca surge un extraño monosílabo, gol, que dicho dos veces (es el caso del hombrecito), resulta ser dos goles. Allí se rompe el monosílabo, típico caso de las palabras que se vuelven plurales. Por eso, Gimnasia tiene hinchada, que es un conjunto de varios monosílabos, que gritando, como el hombrecito -eso que es la suma de goles-, es decir, goles.
4. Gracias Lobo, pero la próxima avisá, así me compro un holter y recupero el ritimo cardíaco. Seguimos en primera.
5. Esto es Gimnasia, o mejor: Ginasia o Ginasiá, como le gusta decir a los seguidores del Lobo. No es sencillo ser del Lobo, o de Ginasia. Pero ser de Ginasia es no preguntar por la ausencia de la m. Nunca importó, menos ahora.
Más de 15 mil triperos en la esquina de 7 y 50, festejando la permanencia en primera.
6 comentarios:
Todavía tiemblo. Los ataúdes, las "velus-ortus magnánimus vicious" y el asadito de City Bell....al freezer.
Ojo con la caipirinha, puede hacerte sentir mal.
Muy buena la nota, pichón.
Gracias Mellizus. Viste a Obama rindiéndose ante el mellizo Barros Schelotto? En clave, estaba felicitándolo por los 3 goles de Gimnasia. Las velas estaban apagadas o encendidas en el momento de depositarlas donde corresponde?
Mario: por la cara de algunos amigos pinchas, las velas fueron introducidas previa ignición. La ansiedad les jugó una mala pasada. El tiempo apagará su bronca...y sus mechas. Eso sí, no servirán ni para un mísero cumpleaños. A lo sumo, algún cumpleANOS. Abrazo
(Silencio. Siete veces silencio. Mario, te quiero un montón, pero no podía dejar de decir esto)
Todo bien, Horacio, sin rencores. Cuando te visite en Bs As, te presentaré a un amigo ruso (justo pra vos, que estuviste allí), se llama Vladimir Trotyl, y pesa como 70 kilos. Te lo presento y me voy. Sin rencores, repito. Te quiero y felicito.
Sin rencores, y sin chicanas, Mario, yo también los felicito. La ciudad necesita el clásico.
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